La intervención del psicólogo forense en este ámbito depende de la decisión personal del Magistrado-Juez del Juzgado al que el profesional se encuentre adscrito.
El informe normalmente suele ser solicitado dentro de uno de los procedimientos siguientes:
*Sentimientos: Desilusión, insatisfacción, alienación, ansiedad, incredulidad, desesperación, temor, angustia, ambivalencia, shock, vacío, enojo, caos, inadecuación, baja autoestima, pérdida.
*Actitudes: Evitación, llantos, confrontaciones, riñas, negación, abandono físico y emocional, pretensión de que todo está bien, intentos de recuperar el afecto, búsqueda de consejo en la red social.
*Sentimientos: Depresión, separación, enojo, desesperanza, autocompasión, indefensión.
*Actitudes: Negociación, gritos, teatralidad, intentos de suicidio, consulta a un abogado.
*Sentimientos: Confusión, furia, tristeza, soledad, alivio, venganza.
*Actitudes: Separación física, intentos de terminar con el proceso legal, búsqueda de arreglos económicos y sobre la custodia de los hijos.
*Sentimientos: Preocupación por los hijos, ambivalencia, insensibilidad, incertidumbre.
*Actitudes: Lamentos, búsqueda de apoyo en amigos y familiares, ingreso o reingreso en el mundo laboral (sobre todo en mujeres), falta de poder para tomar decisiones.
*Sentimientos: Indecisión, optimismo, resignación, excitación, curiosidad, remordimiento, tristeza.
*Actitudes: Finalización del divorcio, búsqueda de nuevas amistades, inicio de nuevas actividades, exploración de nuevos intereses, estabilización del nuevo estilo de vida y de las rutinas diarias para los hijos.
Consecución de independencia emocional y elaboración psicológica de los efectos de la ruptura.
*Sentimientos: Aceptación, autoconfianza, energía, autovaloración, entereza, tonificación, independencia, autonomía.
*Actitudes: Recomposición de la identidad, búsqueda de una nueva relación estable, adaptación al nuevo estilo de vida, apoyo a los hijos para aceptar el divorcio y la continuidad de las relaciones con los dos padres.